“... en México estamos cayendo en un entorno en el que, pese a que las autoridades fiscales no pueden exigir más de lo debido a los contribuyentes, lo hacen a fin de cuentas - por justificar su trabajo más que por recaudar, propiamente -. Así, la crisis y el abuso de las autoridades están provocando que los contribuyentes caigan en estado de necesidad, en incumplimientos por confianza legítima y, desde luego, en una serie de casos fortuitos o fuerza mayor que deberían excluirlos de toda responsabilidad, a pesar de que en los textos de materia tributaria poco se hable de ello...”.
“... en México estamos cayendo en un entorno en el que, pese a que las autoridades fiscales no pueden exigir más de lo debido a los contribuyentes, lo hacen a fin de cuentas - por justificar su trabajo más que por recaudar, propiamente -. Así, la crisis y el abuso de las autoridades están provocando que los contribuyentes caigan en estado de necesidad, en incumplimientos por confianza legítima y, desde luego, en una serie de casos fortuitos o fuerza mayor que deberían excluirlos de toda responsabilidad, a pesar de que en los textos de materia tributaria poco se hable de ello...”.