Casualmente, así, cabalgando uno su propia cabeza, es como empieza El Peinado de Calígula, el primer espacio radiofónico de entretenimiento infantil protagonizado de manera exclusiva por adultos que se dirigen a menores de edad como si fuesen adultos, el único en el que se habla a vuestros hijos de tú a tú, como si ya estuviesen perdidos. No sé si para alguno de vosotros hoy es la primera vez, ya que no lo es ni para nuestro concursante, Bogdano, pero os recordaré en cualquier caso que aquí el objetivo es localizar a los ídolos de uno y darles caza. El título de nuestro programa responde a una circunstancia arbitraria: cuando el proyecto arrancó, los fundadores no disponían de presupuesto suficiente para comprar el nombre de Barrabás. El Peinado de Calígula quiere ser un entretenimiento antiguo para tiempos modernos.
Casualmente, así, cabalgando uno su propia cabeza, es como empieza El Peinado de Calígula, el primer espacio radiofónico de entretenimiento infantil protagonizado de manera exclusiva por adultos que se dirigen a menores de edad como si fuesen adultos, el único en el que se habla a vuestros hijos de tú a tú, como si ya estuviesen perdidos. No sé si para alguno de vosotros hoy es la primera vez, ya que no lo es ni para nuestro concursante, Bogdano, pero os recordaré en cualquier caso que aquí el objetivo es localizar a los ídolos de uno y darles caza. El título de nuestro programa responde a una circunstancia arbitraria: cuando el proyecto arrancó, los fundadores no disponían de presupuesto suficiente para comprar el nombre de Barrabás. El Peinado de Calígula quiere ser un entretenimiento antiguo para tiempos modernos.