Publicado en 1996, es el segundo libro de relatos de Martín Rejtman y
supuso una revolución para la literatura argentina, que en aquel
momento, como si hubiesen escaseado los clichés, pocos notaron. Estas
historias extraordinarias aún pueden leerse como si hubiesen sido
escritas mañana, en tanto los únicos signos del paso del tiempo que se
detectan en ellas no le pertenecen al texto sino al mundo que lo rodea
. Al igual que en «Rapado» y «Literatura y
otros cuentos» , brilla aquí la enorme capacidad del autor y
cineasta para convertir lo cotidiano en algo asombroso, y viceversa.
Publicado en 1996, es el segundo libro de relatos de Martín Rejtman y
supuso una revolución para la literatura argentina, que en aquel
momento, como si hubiesen escaseado los clichés, pocos notaron. Estas
historias extraordinarias aún pueden leerse como si hubiesen sido
escritas mañana, en tanto los únicos signos del paso del tiempo que se
detectan en ellas no le pertenecen al texto sino al mundo que lo rodea
. Al igual que en «Rapado» y «Literatura y
otros cuentos» , brilla aquí la enorme capacidad del autor y
cineasta para convertir lo cotidiano en algo asombroso, y viceversa.