Esta es la historia de un cuento muy chiquito, tanto que termina escondiéndose debajo de una pestaña, pero es a la vez tan inmenso como la imaginación. Si por la pestaña ruedan lágrimas de mar salado, el cuento se llena de barcos. Y en esos barcos viajan los más increíbles personajes: peluqueros, cocineros, animales, árboles, calesitas… Hasta que “… ya está. En el cuento escondido no cabe nada más”. Y cuando ya no queda ni un lugarcito para algo o alguien más, entonces los barquitos se alejan hasta desaparecer en alta mar… hasta la próxima vez.
Esta es la historia de un cuento muy chiquito, tanto que termina escondiéndose debajo de una pestaña, pero es a la vez tan inmenso como la imaginación. Si por la pestaña ruedan lágrimas de mar salado, el cuento se llena de barcos. Y en esos barcos viajan los más increíbles personajes: peluqueros, cocineros, animales, árboles, calesitas… Hasta que “… ya está. En el cuento escondido no cabe nada más”. Y cuando ya no queda ni un lugarcito para algo o alguien más, entonces los barquitos se alejan hasta desaparecer en alta mar… hasta la próxima vez.