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Melancol�a - cl�nica y transmisi�n generacional

Melancol�a - cl�nica y transmisi�n generacional

Centro de Documentaci on Musical
0/5 ( ratings)
Si la melancol�a corre el peligro de perder el estatuto que ha tenido durante tantos siglos, en una �poca atravesada por el capitalismo, en una �poca de individuos aparentemente libres y solos, en una �poca de sobreabundancia de objetos, en una �poca en que la tristeza es un pecado ; en este caso, es el momento m�s adecuado para hablar de la melancol�a, y cuanto m�s, mejor. El melanc�lico contempor�neo, si es que existe, tiene muchas dificultades para poder estar triste.La psiquiatr�a ha emprendido un retroceso inesperado y ha vuelto al hogar que abandon� en los a�os setenta: la casa de la neuropsiquiatr�a. Sin embargo, caben resistencias y el texto de Carlos Fern�ndez lo demuestra a todas luces. Su estudio de las formas cl�nicas de la tristeza es un bal�n de ox�geno que mejora nuestro presente. Sin alejarse del todo de la perspectiva psiqui�trica, pues no quiere caer en ning�n radicalismo ni dar muestras del mismo dogmatismo que se propone combatir, su apoyo te�rico es b�sicamente freudiano. Este apoyo, b�sico, esencial, nos devuelve la inspiraci�n necesaria que nunca debi� de ausentarse de nuestra interpretaci�n. Al menos si aspiramos a evitar la simplificaci�n de la psicopatolog�a que ahora padecemos. La idea de la tristeza concebida como un duelo del deseo, como una p�rdida de cualquier anhelo, late en esta investigaci�n. Una p�rdida o paralizaci�n del deseo que se puede producir de dos modos diferentes: ocasionalmente, lo que permite decir de alguien que simplemente est� melanc�lico; o de un modo sistem�tico, constitutivo o estructural, lo que autoriza a distinguir a quienes son melanc�licos en s�, todo el tiempo, y no s�lo a los que lo est�n. Esta �ltima, ese modo de ser, esa melancol�a constante, da pie a alguna de las reflexiones de mayor calado que podemos leer en el texto. Una de ellas concurre para preguntarse por la causa que lleva a una persona a sufrir peri�dicamente estados de inhibici�n y p�rdida de energ�a mental. Otra, para conocer c�mo se transmiten esas ausencias de deseo de generaci�n en generaci�n sin recurrir a la consabida hip�tesis gen�tica.Jos� Mar�a �lvarez y Fernando Colina
Pages
320
Format
Paperback
Release
May 15, 2019
ISBN 13
9781072938422

Melancol�a - cl�nica y transmisi�n generacional

Centro de Documentaci on Musical
0/5 ( ratings)
Si la melancol�a corre el peligro de perder el estatuto que ha tenido durante tantos siglos, en una �poca atravesada por el capitalismo, en una �poca de individuos aparentemente libres y solos, en una �poca de sobreabundancia de objetos, en una �poca en que la tristeza es un pecado ; en este caso, es el momento m�s adecuado para hablar de la melancol�a, y cuanto m�s, mejor. El melanc�lico contempor�neo, si es que existe, tiene muchas dificultades para poder estar triste.La psiquiatr�a ha emprendido un retroceso inesperado y ha vuelto al hogar que abandon� en los a�os setenta: la casa de la neuropsiquiatr�a. Sin embargo, caben resistencias y el texto de Carlos Fern�ndez lo demuestra a todas luces. Su estudio de las formas cl�nicas de la tristeza es un bal�n de ox�geno que mejora nuestro presente. Sin alejarse del todo de la perspectiva psiqui�trica, pues no quiere caer en ning�n radicalismo ni dar muestras del mismo dogmatismo que se propone combatir, su apoyo te�rico es b�sicamente freudiano. Este apoyo, b�sico, esencial, nos devuelve la inspiraci�n necesaria que nunca debi� de ausentarse de nuestra interpretaci�n. Al menos si aspiramos a evitar la simplificaci�n de la psicopatolog�a que ahora padecemos. La idea de la tristeza concebida como un duelo del deseo, como una p�rdida de cualquier anhelo, late en esta investigaci�n. Una p�rdida o paralizaci�n del deseo que se puede producir de dos modos diferentes: ocasionalmente, lo que permite decir de alguien que simplemente est� melanc�lico; o de un modo sistem�tico, constitutivo o estructural, lo que autoriza a distinguir a quienes son melanc�licos en s�, todo el tiempo, y no s�lo a los que lo est�n. Esta �ltima, ese modo de ser, esa melancol�a constante, da pie a alguna de las reflexiones de mayor calado que podemos leer en el texto. Una de ellas concurre para preguntarse por la causa que lleva a una persona a sufrir peri�dicamente estados de inhibici�n y p�rdida de energ�a mental. Otra, para conocer c�mo se transmiten esas ausencias de deseo de generaci�n en generaci�n sin recurrir a la consabida hip�tesis gen�tica.Jos� Mar�a �lvarez y Fernando Colina
Pages
320
Format
Paperback
Release
May 15, 2019
ISBN 13
9781072938422

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