Hay planetas y planetas, ya se sabe, pero pocos planetas tan insólitos como Camarjali. El que se atreva a explorarlo -y hasta el momento sólo Guem, Julmar y Parcino lo han intentado - deberá estar dispuesto a todo. Especialmente si se tiene en cuenta que por Camarjali no se viaja en tren sino en agujero, un medio de transporte sumamente veloz, poético incluso, pero decididamente desconcertante. El misterio del planeta mutante recibió el premio Más Allá a la mejor novela de ciencia ficción en 1984.
Hay planetas y planetas, ya se sabe, pero pocos planetas tan insólitos como Camarjali. El que se atreva a explorarlo -y hasta el momento sólo Guem, Julmar y Parcino lo han intentado - deberá estar dispuesto a todo. Especialmente si se tiene en cuenta que por Camarjali no se viaja en tren sino en agujero, un medio de transporte sumamente veloz, poético incluso, pero decididamente desconcertante. El misterio del planeta mutante recibió el premio Más Allá a la mejor novela de ciencia ficción en 1984.