Este evangelio fue escrito por los años 80, probablemente en
un lugar al oeste de Palestina. Sus fuentes principales son el
evangelio de Marcos y un escrito de autor desconocido, que
contiene dichos y parábolas de Jesús, que se le llama “Fuente
Q”. Lucas aporta abundante material recopilado por él, que le
permite crear bellas escenas y ofrecer parábolas llenas de realismo
conmovedor y de gran humanidad.
La obra de Lucas sitúa la persona de Jesús y la comunidad de
los discípulos en la historia de la salvación. Esta historia la concibe
en tres tiempos. Hay un antes, representado por el antiguo
testamento, que culmina con la actividad de Juan Bautista.
Le sigue la vida y actuación de Jesús, desde su encarnación en
el seno de María hasta su ascensión al cielo. La tercera etapa
la representa la comunidad de discípulos, cuya primera manifestación
más significativa la coloca Lucas en Pentecostés. A
esta última parte dedica la segunda parte de su extensa obra:
Los Hechos de los Apóstoles.
Este evangelio fue escrito por los años 80, probablemente en
un lugar al oeste de Palestina. Sus fuentes principales son el
evangelio de Marcos y un escrito de autor desconocido, que
contiene dichos y parábolas de Jesús, que se le llama “Fuente
Q”. Lucas aporta abundante material recopilado por él, que le
permite crear bellas escenas y ofrecer parábolas llenas de realismo
conmovedor y de gran humanidad.
La obra de Lucas sitúa la persona de Jesús y la comunidad de
los discípulos en la historia de la salvación. Esta historia la concibe
en tres tiempos. Hay un antes, representado por el antiguo
testamento, que culmina con la actividad de Juan Bautista.
Le sigue la vida y actuación de Jesús, desde su encarnación en
el seno de María hasta su ascensión al cielo. La tercera etapa
la representa la comunidad de discípulos, cuya primera manifestación
más significativa la coloca Lucas en Pentecostés. A
esta última parte dedica la segunda parte de su extensa obra:
Los Hechos de los Apóstoles.